¿Cómo afecta el estrés a su bienestar y cómo se relaciona el estrés con los dolores de cabeza? Analicemos las formas más comunes en que el estrés puede hacerlo más propenso a los dolores de cabeza...
Si bien la mayoría de nosotros no obtenemos suficiente sueño profundo, restaurador y reparador como debe ser, el estrés puede interferir y afectar tanto la cantidad como la calidad del sueño que obtenemos. Si estás dando vueltas y vueltas toda la noche, tu cuerpo no tendrá la oportunidad de descansar y esto puede agregar tensión a tu mañana. Si luego consumes mucha cafeína para que te ayude a pasar el día, esto puede provocar un círculo vicioso al obstaculizar tu capacidad para dormir la noche siguiente.
La forma en que reaccionamos al estrés también nos afecta. Algunos de nosotros literalmente "lo descargamos" en nuestro cuerpo, canalizando el estrés hacia nuestro cuello y hombros. Esto puede causar cefaleas tensionales, donde los músculos de la parte posterior del cuello se tensan. Se pueden desarrollar "nudos" en los músculos, enviando dolores punzantes a tu cabeza.
El estrés puede afectarnos al interrumpir nuestra rutina saludable normal. En lugar de comer bien y hacer ejercicio, recurrimos a la comida chatarra y evitamos el gimnasio. Comer en exceso y no mantener un peso saludable, puede aumentar el estrés en el cuerpo, la columna vertebral y el corazón. Los estudios han demostrado que el riesgo de sufrir dolores de cabeza es mayor entre las personas con sobrepeso u obesidad.
Muchos de nosotros pensamos que manejamos bien el estrés y que solo necesitamos unas vacaciones de dos semanas para volver a la normalidad. Pero en realidad, dos semanas de descanso hacen muy poco para cambiar tu vida durante las otras cincuenta semanas del año. La clave es aprender a manejar y lidiar con los factores estresantes "día a día". La presencia de dolor de espalda o de cuello también puede agregar estrés a tu vida al dificultar tus actividades diarias. Si es tu caso, por favor consulta a tu médico quiropráctico.
Dado que la presencia de estrés puede aumentar tu riesgo de sufrir dolores de cabeza, mejorar en el manejo de tus niveles de estrés también puede ayudar a reducir tu riesgo. Cada día, trata de hacer algo positivo por ti mismo y resiste a la tentación de preocuparte por el futuro y arrepentirte del pasado. Toma cada día como venga y trata de tener pensamientos positivos. Estas prácticas pueden ayudar a mejorar tu actitud y perspectiva. Prueba una actitud diferente al abordar las cosas estresantes en tu vida. A veces, simplemente colocar las cosas en perspectiva y no hacer hincapié en las pequeñas cosas, es importante para llevar una vida más libre de estrés y disfrutar de los placeres ocultos que la vida nos brinda todos los días.